8th Jul 2025
Gato estaba en la cama, mirando por la ventana. "¡Miau!", decía, ¿qué hay afuera? La tierra estaba cubierta de flores y mariposas. Su amigo, un pájaro llamado Pío, voló por allí y gritó, "¡Gato! ¡Vamos a jugar!" Gato saltó de la cama y respondió, "¡Sí, Pío! ¡Me encantaría!"
Gato y Pío jugaron en la tierra fresca y suave. Hicieron carreras y atraparon mariposas. Gato dijo: "¡Esto es muy divertido!" Pío le contestó: "Sí, la tierra es mágica para jugar!" Al final del día, Gato dijo: "¡Qué gran aventura! ¡No quiero volver a la cama!" Pero finalmente tuvo que despedirse y volver a casa.
A la mañana siguiente, Gato se despertó con el sol brillando en su rostro. "¡Miau!", dijo mientras se desperezaba. Al mirar por la ventana, vio a Pío esperándolo. "¡Gato! Ven, hoy hay algo especial en la tierra mágica", dijo Pío emocionado. Gato se levantó rápidamente y corrió hacia afuera, listo para otra aventura.
Cuando llegaron, Gato vio que las flores estaban aún más brillantes y coloridas. "¡Mira, Pío!", exclamó Gato, "¡parecen estar bailando!" Pío rió y dijo, "Sí, están felices de vernos." De repente, una mariposa muy grande voló sobre ellos, y Gato y Pío decidieron seguirla, riendo y saltando juntos.
Después de un día lleno de diversión, Gato se recostó sobre la tierra y miró al cielo. "Gracias, Pío, por este día tan maravilloso", dijo Gato con una sonrisa. "Siempre podemos divertirnos juntos en la tierra mágica", respondió Pío. Con el corazón lleno de alegría, Gato regresó a casa, sabiendo que mañana habría más aventuras esperándolo.