27th Jul 2025
En una granja lejana, vivía una gallina llamada Clara. "¡Clara, tu huevos son los mejores!" decía Juan, un niño de la granja, mientras la acariciaba. Clara ponía huevos dorados que alimentaban a todos. La granja era feliz y todos cuidaban de Clara, pues sabían que un zorro astuto quería atraparla. "No dejes que el zorro se acerque, Clara!", gritaba María.
Un día, Clara escuchó al zorro acechando. Con valentía, decidió hacer un plan. "¡No puedo dejar que me atrapen!", pensó. Reunió a todos los animales de la granja. "¡Ayúdenme a hacer ruido!", dijo. Juntos, todos empezaron a cacarear. El zorro se asustó y se fue corriendo, dejando a Clara y a sus amigos en paz.
Poco después, Clara ideó un plan aún más ingenioso. "Construyamos una cerca con los palos que encontramos", sugirió. Todos los animales trabajaron juntos, y en poco tiempo, habían levantado una sólida barrera alrededor del gallinero. "Con esto, el zorro no podrá llegar tan fácilmente", dijo Clara contenta mientras picoteaba en el suelo.
Sin embargo, el zorro no se dio por vencido. Después de varios intentos fallidos, decidió utilizar su astucia para engañar a los animales. "Si logro distraerlos, podría acercarme más", pensó. Así que, una noche, mientras todos dormían, el zorro comenzó a hacer ruidos extraños para confundirlos.
Pero Clara, siempre atenta, escuchó los ruidos y despertó a los demás. "Es solo el zorro intentando engañarnos", dijo con firmeza. Confiados en el liderazgo de Clara, los animales permanecieron alertas y unidos. Al ver que su plan había fracasado nuevamente, el zorro decidió buscar otra granja, dejando a Clara y sus amigos en paz y celebrando su triunfo.