6th Jun 2025
Miguel era un padre cariñoso, y siempre decía: "¡Hola, mis pequeños!" A menudo se sentaba con sus hijos, Alexander, Gianella y Valesska. Un día, cuando Valesska llegó a casa, saltó y dijo: "¡Papá, saqué un diez en el examen!" Miguel sonrió y la abrazó fuerte. "¡Eres mi estrella!", respondió con alegría. Aunque a veces sus padres no eran tan amables con él, Miguel se esforzaba por dar lo mejor a sus hijos.
Valesska, con su pelo rizado y brillante, miró a su papá y le dijo: "Gracias por siempre estar ahí, papá". Miguel se sintió lleno de amor. "Siempre estaré aquí para ti, Valesska", contestó. Y en ese momento, Miguel recordó a Blacky, su perrito que lo hacía reír, él pensó: "A Blacky le gustaría esto también". En su hermosa casa, con paredes recién pintadas, Miguel se dio cuenta de que no importa lo difícil que haya sido su pasado, su familia era su mayor tesoro.
Esa noche, Miguel decidió preparar una cena especial para celebrar el éxito de Valesska. En la cocina, Alexander y Gianella lo ayudaban a mezclar ingredientes. "Vamos a hacer su comida favorita", dijo Miguel con entusiasmo. "¡Pizza!", gritaron los tres al mismo tiempo, riendo juntos. Con harina en las narices y sonrisas en los rostros, crearon una cena deliciosa y memorable.
Después de la cena, se acurrucaron en el sofá con una manta cálida, y Miguel comenzó a contarles una de sus historias favoritas. "Había una vez un valiente explorador...", empezó, y los ojitos de Alexander y Gianella brillaron de curiosidad. Valesska se recostó contra el hombro de su papá, sintiéndose segura y amada. "¡Esta es mi parte favorita!", susurró Gianella mientras Miguel narraba las aventuras del explorador.
Al terminar el cuento, Miguel besó suavemente a cada uno de sus tres pequeños en la frente. "Recuerden siempre que son mis estrellas más brillantes", les dijo, con el corazón lleno de amor. Los niños se acurrucaron cerca de él, sintiendo la calidez del hogar. Y así, Miguel supo que aunque a veces la vida era difícil, siempre tendría un brillo especial en su corazón gracias a sus hijos.