8th Dec 2024
Valeria estaba emocionada. "¡Mamá, ya soy grande!" dijo, mientras saltaba en su cama. Hoy era un día especial: ¡Valeria dejaría su pañal! Su mamá sonrió y le dijo: "Sí, querida, a partir de ahora usarás calzoncitos de colores. Vamos a celebrarlo juntos."
Valeria y su mamá fueron a la tienda y eligieron calzoncitos con animales. "¡Mira este conejo!" exclamó Valeria. Cuando llegó a casa, se puso muy feliz al ver que no necesitaba más pañales. "¡Soy una niña grande!" gritó mientras giraba y bailaba en su habitación.
Después de cambiarse, Valeria y su mamá decidieron hacer una fiesta de "niña grande". Inflaron globos de colores y prepararon galletitas en forma de animales. Valeria invitó a su osito de peluche y a su muñeca favorita. "Ellos también están orgullosos de mí", dijo Valeria mientras les servía un té imaginario.
Más tarde, Valeria tuvo que ir al baño. "¿Puedo intentarlo sola?" preguntó con entusiasmo. Su mamá le sonrió y asintió con la cabeza. Valeria entró y cerró la puerta con cuidado. Después de un momento, salió con una gran sonrisa y dijo: "¡Lo hice!". Su mamá la abrazó fuerte y le dijo: "Estoy muy orgullosa de ti, Valeria".
Al caer la noche, Valeria se puso su pijama nuevo de rayas. "Ahora duermo como una niña grande", susurró mientras se acurrucaba en su cama. Su mamá la arropó y le dio un beso en la frente. "Dulces sueños, mi valiente Valeria", dijo. Valeria cerró los ojos, soñando con más aventuras de niña grande.